lunes, 10 de diciembre de 2012

Fin del mal.

Durante la Misa este pasado domingo 9 de diciembre, en la homilía, el padre nos leía los numerales del Catecismo que hablan del Fin de los Tiempos como explicasión sobre lo que dice la Doctrina al respecto en preparación para el Adviento. De paso alejando o disipando las dudas que les pueda haber causado a muchos las supuestas profecías mayas sobre el 21 de diciembre de este año. Cuando el padre dijo; "por cierto el 21 de diciembre no pasará nada", Jesús me dijo lo siguiente:



+Nada es una palabra incomprendida, más bien todo comenzará ese día. No hablo del fin del mundo sino del fin del mal. El fin del mundo nadie lo sabe y no lo sabrán, cuando haya paz entonces vendrá el fin. 

viernes, 2 de noviembre de 2012

Viste de hábito

Hoy 2 de noviembre recibí esta locución de parte de Jesús, luego de haberme dicho algunas cosas en Misa o en la Hora Santa como éstas: "+Ven a adorarme perpetuamente."  Más tarde esta otra: "+ Con permiso del Obispo, viste de hábito como tus hermanos consagrados." O esta otra; "+Hasta cuando te resistirás, necesito tu entrega" Situaciones diversas como éstas expresiones y acontecimientos místicos, como ver su mano derecha siendo clavada al madero...por la muñeca (algo realmente insoportable de ver) sumados a discernimientos en algunas personas allegadas a mi, me decían que de alguna manera Jesús me pedía ser Sacerdote. Soy Franciscano Seglar, casado con 4 hijos, católico de rito latino...esa posibilidad era más que imposible. No obstante, a eso aparentemente me llevaba Jesús. Pensé que tal vez suponía hacer una transición al rito oriental donde si pueden casarse los sacerdotes. Sin embargo, esa opción en el rito oriental es una excepción y no la regla. Entonces ¿a qué me llama Jesús? He aquí la respuesta que tanto he estado esperando. Que como notarán deja abierta más preguntas.

+ Creo haberte dicho Cruz que tu Sacerdocio viene por el Bautismo tal como expresa claramente la Doctrina. No es a eso que te llamo, y bien te vendría poder consagrar pero no es así que lo quiero. Deseo que seas tal como eres, deseo que sea la humildad la que te mueva, deseo que nada se interponga en tu ascenso a la santidad. Los signos visibles son necesarios, los signos son importantes...mi pedido para el Obispo debe ser cumplido, si él lo permite vestirás de hábito como los consagrados. Te preocupa cómo sería eso desde tu realidad seglar e insertado en el mundo...pues si el Obispo lo permite  vestirás de hábito incluso en tu trabajo por que si él lo determina el mundo seglar no lo podrá impedir. Si el Obispo no lo aprueba de entrada Yo enviaré una señal clara de que es mi deseo...eso tardará Cruz no será inmediato pero ya te había anticipado que te diría cómo debías presentarte. El vestir de hábito tiene un propósito claro y lo entenderás llegado el momento. Por ahora insiste a tu confesor que haga la consulta, no debes hacerla tú. Estás llamado a grandes cosas Cruz y todo se irá develando poco a poco...ya algunas cosas se dejan ver claro otras solo se entienden erradamente. No te preocupes por la actitud del confesor, sigue con él hasta que mis ángeles terminen de prepararlo todo. El 21 de diciembre solo debes estar dispuesto, y si de verdad no hay tanta resistencia como he notado en tu alma, verás el Milagro. Nada más debes saber por ahora. Queda en mi paz.

sábado, 1 de septiembre de 2012

De rodillas

Esto fue recibido recién hoy mismo. 1ro de septiembre de 2012.


Hace tres días me llamas a escribir pero nada habías dictado. Habla Señor que tu siervo escucha. 

+ Hablaré corto y conciso Cruz. La Eucaristía, como bien sabes es don mío a la humanidad, es mi precencia misma. Cuando te pedí que me recibieras de rodillas, y te pedí que lo hablaras con el Sacerdote en virtud de  dejar saber mi querer al respecto no implicaba una imposición, nada que se imponga supondrá acto propio. Distinta es la Gracia que recibida sin mérito mueve al hombre a mayor Gracia. Quien sabe que estoy Yo en la Eucaristía, quien sabe que yo mismo Soy la Eucaristía, ese tal se pondrá de rodillas en acto de humildad, de amor y de adoración. Sin embargo, aquel que por razones de salud no pueda hacerlo bien le basta una reverencia. Pero quien cree que porque la Iglesia lo permite, me recibe en las manos sin más, y que con eso  no comete sacrilegio está equivocado. Pero no me mal entiendan los que leen, quiero que tengan acceso a mi, que me toquen, que me sientan pero desde la sacramentalidad misma que supone la Eucaristía y no desde la comodidad humana. Algunos creen que es más santa y devota la acción de recibirme en las manos por el hecho de tener un contacto directo conmigo, pero entiendan que solo las manos consagradas por un sucesor mío pueden tocarme sin que eso suponga un mancha a lo sagrado. No es menosprecio Cruz es un signo real de la Santidad a la que están todos llamados. ¿O es que alguno podrá encontrar desorden en el orden? Todo lo sagrado y establecido por Mi tiene un propósito que no puede ser cambiado solo por la comodidad de algunos. ¡No se dejen engañar! Queda en mi paz.

miércoles, 28 de marzo de 2012

Atados al mundo

Esta fue la última locusión que recibí para promulgar de forma pública. Recibida el 16 de junio de 2009. Luego la forma de Jesús para hablarme cambió. Sus expresiones son distintas, los mensajes son más cortos y mi corazón sigue sintiendo ese ardor en cada ocasión que me habla. Los mensajes al mundo los da ahora por medio de otros pero no descarta usarme cuando así lo desee. Como lo es el mensaje que recibí ayer y que compartiré para los que leen esto mañana y así mismo cualquier otro mensaje que Él me indique publicar acá.




+Ya se que te sorprende que llame a esta locución “Atados al mundo”, luego de haber explicado para ti y para los hijos que te he dado lo que significa renunciar a las cadenas que los atan, pero es mucho lo que hay que decir aun. Las cosas simples manifiestan su grandeza desde la complejidad que se le da. No Cruz no me contradigo, escucha con calma primero, luego escribe. Toda simplicidad tiene un camino arduo de complejidades que pasan desapercibidas para el hombre, y son una nada para la divinidad que las propicia. Pero el hombre se empeña en hacer compleja la simplicidad como si entendiera cómo surge, y como tratando de engrandecer su propia vida desde lo que debe ser simple. Por ello se apegan a las cosas, como bien le explicabas a la Rosa del Desierto, pero va más lejos aun Cruz. El hombre desde la comisión del pecado original busca llenar el vacío que mi presencia les suponía con cualquier otra cosa menos conmigo. No comprenden que solo Yo lleno las vidas y las sustento. En ese intento muchos no comprenden que vuelven a pecar pues dan poder a aquello que no lo tiene. Su pecado es contra el Primer Mandamiento. Una idea, por ejemplo, es solo una palabra que usan para definir algún concepto, pero el hombre asume esa idea como una forma de vida con poder propio, con entidad propia, con valor propio. No hay verdad en ello, la idea tiene el poder, la entidad y el valor que el hombre le da. Lo mismo sucede con los objetos, y el uso que se les da. Son solo objetos pero el hombre quiere darle valor mágico, místico y esotérico desvirtuando así el verdadero uso que se le debe a los objetos, y de paso ofendiendo la Creación misma. No hay nada oculto bajo el cielo, no hay poder solo en el que es Todopoderoso, no hay existencia sino en el que existe. La vida no es solo comer, dormir, defecar y amar desde el sentido humano. La vida es amar desde el sentido divino, la vida para el hombre debe ser un constante ágape tomando como punto de partida las enseñanzas que les he propuesto en el Evangelio. Nunca dije que se ataran al mundo sino que dije “ustedes no son del mundo”. Por ello vivir atados al mundo es contrario a la vida evangélica, es por esto que trabajar para el Reino no es solo evangelizar sino hacer extraordinario lo que es ordinario.

Perdona la interrupción mi Señor, pero me gustaría que explicaras con detalle qué significa hacer de lo ordinario algo extraordinario.

+Eso quiere decir que deben santificar su empeño diario, su trabajo, su proceder, su actuar, su pensar. Todo debe estar encaminado al bien del prójimo, al bien de la comunidad. Un ejemplo de esto sería hacer santo tu trabajo en cada ejecución, en cada proceder. Hacer santo tu trabajo es hacerlo con el corazón, con amor, no solo por la retribución, pues si bien es cierto que el obrero necesita de su salario, no es menos cierto que la obra refleja al obrero en la perfección misma de ésta. Se maravillan los que observan la obra de la perfecta ejecución del obrero cuando el obrero pone su pasión en santificar esa obra con un trabajo de excelencia. Mas si solo trabaja por el salario, la obra será mediocre como mediocre es su esfuerzo en santificarla. ¿Hay mayor retribución que un trabajo bien hecho? Un barrendero hace extraordinaria su labor tediosa y repetitiva si en cada barrida asume una realidad divina. Por ello hay santos que lo son solo por barrer su Parroquia con empeño y dedicación. Un farmacéutico mediocre venderá los medicamentos a quien se los pide a cambio de un precio pagado y pautado, un farmacéutico extraordinario hará exactamente eso, pero también orará por el enfermo, le dará los buenos días, lo saludará con cariño, y le despachará el medicamento aun sin que el enfermo tenga con qué pagar. Una ama de casa que contraviene con su propia situación porque gustaría mejor de ser rica y con sirvientes, hará sus labores a regañadientes, mientras que una ama de casa extraordinaria hará sus labores con la felicidad y convicción de que le sirve a los suyos lo mejor de sí misma. Así podría estar dándote miles de ejemplos Cruz, en todos la tendencia es la misma, aquel que santifica sus acciones hace de ellas obras extraordinarias aun siendo sencillas cosas del mundo. Pero no las hace extraordinarias por el objeto de las cosas o por las cosas en sí mismas, sino porque en la sencillez y humildad que le caracterizan comprende aquello de que el prójimo es imagen y semejanza de Dios, y que si hace algo por el prójimo lo hace por Mí, me sirve a Mi, obra por Mi. Lamentable es que los que son mediocres en su servicio no notan que a quien sirven de manera mediocre es al Rey de reyes y Señor de señores, como si obraran partiendo del enemigo de las almas. Un servicio mediocre al Rey tendrá del Rey una respuesta de desaprobación. De hecho éstos no tienen más señor que su sola egocéntrica vida. El que vive apegado al mundo vive desapegado de Dios en ese aspecto de su vida, aunque ese aspecto sea el servicio en la Iglesia. Si Cruz, así como le explicabas a la Rosa del Desierto. Un fiel que hace y obra en la Iglesia desde el servicio solo por la retribución o por la adulación no vive el desapego. Un ordenado que hace lo propio será juzgado por su iniquidad. La buena noticia es que les amo infinitamente y haré todo por lograr su Salvación y perdonaré desde la Infinita Misericordia de mí Ser a todo aquel que se arrepienta. Aun así deben comprender que no hay Misericordia sin Justicia, y que la Justicia que imparto es verdadera, y será impartida a todos.
Los que viven atados al mundo son aquellos que no creen en mi existencia, no están convencidos, esos son los del corazón de piedra, o los del corazón entre espinos, o los del corazón del camino; son los que no tienen un corazón de tierra buena donde germine la semilla del amor de Dios. Son esos que ves con amuletos, con sortilegios, con creencias extrañas. Son los que relativizan el Evangelio, son los que lo acomodan a su propia existencia, son los que acomodan todo solo a su conveniencia. Son los que creen no tener tiempo para dedicarme en el Sagrario, son los que se sienten avergonzados de levantar las manos al cielo en signo de alabanza, son los que prefieren ver en el mundo lo que se manifiesta más allá del mundo. Viven atados al mundo no solo los drogadictos y las prostitutas que de sí están enfermos en sus vicios, sino también aquel que cree necesitar de la tecnología para vivir, o el que piensa que sin dinero no será feliz. Viven atados al mundo los sacerdotes que no viven de conformidad a su vocación pues su vocación no es el sacerdocio sino las adulaciones de los hombres. Viven atados al mundo los que piensan que ir a Misa es igual que compartir bonitas palabras en una reunión con la naturaleza. Viven atados al mundo aquellos que tienen posiciones de jerarquía y piensan que deben ser servidos en vez de servir. Viven atados al mundo los que aun no teniendo nada viven como si fueran dueños de todo. Viven atados al mundo los que teniéndolo todo creen necesitar más. Están atadas al mundo las mujeres que satisfacen primero su egocéntrica búsqueda de placer antes que atender a sus hijos. Viven atados al mundo los hombres que del mismo modo malgastan el sustento de su familia en vicios y borracheras. Viven atados al mundo los que creen no necesitarme, y los que necesitándome no me invocan porque temen que sus pecados no sean perdonados. En definitiva, viven atados al mundo los que actúan de conformidad a sus solos deseos y no de conformidad a mi Voluntad.

¿Qué hacer Señor? ¿Cómo no vivir atados al mundo?

+Sabes la respuesta Cruz y la vives desde tu vida franciscana. Cumplan mi voluntad, vivan amando al prójimo, busquen a todos el Mayor Bien posible, y estén atentos a mis mensajes. Aquellos que doy por medio de las Lecturas, y los que doy por medio de la vida misma. Participen asiduamente de los Sacramentos, sean humildes, caritativos, y sean hombres y mujeres de fe. Vivan la libertad que solo Yo puedo dar, abandonen el libertinaje y crean en el Evangelio. Queda en mi paz.

Amén.

martes, 27 de marzo de 2012

Unidad

Hoy recibi un pequeño mensaje que me perturbó, pero solo lo publicaré cuando sea propicio cronologicamente, o sea al finalizar las locusiones que aun faltan por publicarse. No obstante, aquello que me dijo hoy tiene mucha relación con esto que me dijo el 2 de diciembre de 2008. Veamos.




Señor Jesús, estaba orando cuando me llamaste a escribir, y temía…no sabía si continuar orando o si interrumpir la oración para escribir…perdona mis dudas y perdona también tantas flaquezas.

+Cruz, ¿no es la oración un diálogo con Dios? Yo soy tu Dios entonces no interrumpes sino que das continuidad. Te llamo mi bien, no por tus flaquezas sino por la anchura de tu fe.

¿Cuál anchura mi Señor? Sabes que he fallado mucho en estas últimas semanas.

+Yo veo a eternidad mi bien, yo veo a futuro, yo veo el plano completo de tu existencia. Tus flaquezas serán tus grandes fortalezas porque aquello que llamas flaqueza verdaderamente será signo de unidad.

No puedo entenderlo. ¿Cómo podría ser signo de unidad no poder ir a Misa?

+Tus Misas las has cumplido todas, recuerda que estas unido a la Pasión y en ella vibra tu propio existir. Cumples con tu familia y qué mejor Misa que esa. Veo que has llorado por no recibirme en la Eucaristía, me recibes Cruz, me recibes. Aun no entiendes del todo lo que el misticismo supone en tu vida pero en la medida que se sigan cumpliendo los signos, en esa medida lo vas a entender. La Eucaristía en un mismo y único Sacrificio, Misterio, Acto de Dios que has vivido muchas veces en tu vida. Tu propio cuerpo, del que tanto te quejas, se hace Eucaristía en cada ocasión que te sacrificas por mantenerte unido a los tuyos. Vendrás Cruz, vendrás a la Eucaristía porque es tu fuente vital, es tu aliciente, es tu conducto de santidad. Pero ya eres Eucaristía en ti mismo y aunque pienses que esto puede ser errado, ya te lo he dicho antes, debes ir develando para ser rechazado todo lo que te he dicho en la privacidad de tu alma. Tú eres Eucaristía.

Jesús, mi Rey, mi Señor, permíteme no tener que escribir esto. Permite que no tenga que enviar esto a los demás. Yo soy solo un franciscano pecador que procura orar mucho, pero no puedo ser Eucaristía mi Dios, no me digas eso. Yo nada soy para ser siquiera comparado con una migaja de pan y Tú me llamas Eucaristía. Te ruego Señor que no me dejes escribir esto.

+¿Crees que hay blasfemia en ello? ¿Crees que es errado decir esta verdad? Más que humildad mi bien, se oculta un ataque del maligno en tus pensamientos. Todo bautizado está llamado a ser Eucaristía, a ser Santo, a ser hijo de Dios. ¿Cómo tu sufrimiento podría ser corredentor si no te haces Eucaristía? Unión hijo mío, unidad. La Eucaristía supone unidad, comunión de Dios con los hombres y de hecho de los hombres conmigo. ¿No te había dicho que en cada Eucaristía cuando me consumes Soy Yo quien te consume? Pues eso hijito, consumido tu ser por el Ser te haces uno con el Ser. Si Yo Soy Eucaristía y tú eres el Cristo entonces tú eres Eucaristía.

Yo soy un cristo pero no el Cristo. Tú insistes en llamarme así y me confundo. Ahora me llamas Eucaristía. Yo solo soy un pecador que te da la espalda en cada ocasión que mi imperfecta humanidad lo desea. Y digo como San Pablo; hago lo que aborrezco y no hago lo que quiero. ¿Cómo podría ser yo el Cristo? ¿Cómo podría ser yo Eucaristía?

+Nada de confusiones, llénate de mi paz. El Bautismo mi bien hace esas maravillas en los hombres. Solo algunos se percatan de ello. Pablo era el Cristo luego de Cristo como fue Pedro. Cada uno en su estilo y cada uno, unido a mí. Pedro desde la primicia, Pablo desde la predicación. Francisco también fue el Cristo, y tú lo eres aunque no lo quieras reconocer, aunque pienses que esto debe ser un equivoco, aunque creas que con tu conducta deberías ser un réprobo. Tú eres el Cristo, para eso has nacido y en ti habrá unidad como has comprobado. Se unen la Pasión y la Cruz por mi sangre, se unen la madera de la Cruz con las pequeñas flores del desierto. Una de esas flores ya lo ha notado, y tú te resistes.

Me resisto mi Señor porque pienso en lo que se le vendrá a mis hijos, a mi esposa, a mi familia. Yo podría soportarlo todo pero ellos serán recipientes de burlas y menosprecios, de desaires y comentarios. Y me siento en cierto modo culpable y hasta responsable de lo que les pasaría si yo acepto totalmente lo que me has venido diciendo. Mis hijos no merecen que en la crueldad de la ignorancia sean llamados hijos de un loco. Ellos me ven como su héroe, su ejemplo, su apoyo. Aunque yo pueda hablarles con tu paz y tu ternura, la incomprensión de la gente sin fe será devastadora para ellos. No creo que sea capaz de hacerles eso.

+¿Dudas de mi poder Cruz? ¿Dudas de la misericordia, de la caridad, de la mansedumbre del Cordero? Todo está previsto en el cielo Cruz. Las cosas se irán dando de modo que nadie menosprecie a tu familia, al menos no de modo devastador. Rechazo lo habrá ciertamente pero eso en ellos será edificador pues precisamente por verte como ejemplo podrán ver en ti como lidiar con el asunto. Te repito Cruz que en ti habrá unidad, no desunión. Por consiguiente todos los intentos del maligno serán nulos frente a la Gracia que fortalecida en ti en cada Sacramento, en cada Eucaristía, hará de esos intentos bálsamo santificador. Ya se acerca el momento, ¿estás dispuesto? No te obligaré a nada, que sea tu disposición la que te guíe. Sería fácil renunciar a todo, pero ten en cuenta que es el maligno quien quiere que renuncies. Te dará miles de excusas que al juicio de los hombres serán acertadas, pero lo que has de hacer no viene de los hombres. Te dirá que es muy grande la responsabilidad y que no podrás hacerlo, pero la grandeza está precisamente en tu pequeñez. Te cuestionará que habiendo tantos santos en la Iglesia, por qué Yo escogería a un pecador como tú. Y la respuesta es sencilla, porque en tu imperfección podrá verse la perfección del Dios Trino. Todo se te ha anticipado mi bien. El tiempo está aquí. Has sido llamado, y has respondido. Eres la señal para el mundo.
¿Cómo se compagina esto con la duración de mi vida terrena? Lo que he de hacer, sin yo planificarlo ni pensarlo será hecho pronto según me has dicho, pero también me has dicho que tendré una larga vida terrena. No lo entiendo.

+Cada capítulo de un libro tiene un comienzo, un punto culminante y una conclusión. Más no es el final hasta leído todo el libro con sus capítulos. Juan leyó ese libro, y no le fue concedido escribir el final sino consumirlo. Pasó por sus papilas gustativas dulcemente, pero fue amargo a su estomago. Juan vivió hace 2,000 años y vio el final. ¿Crees que hay algo imposible para Dios? Tu vivirás largos años pero serás la señal muy pronto, una cosa no impide la otra.

Señor, ¿será que seré la señal sin darme cuenta siquiera que lo soy?

+Es muy difícil de entender para los hombres lo que la grandeza de lo Alto puede hacer. Pero no les será difícil de comprender que lo que el mundo está haciendo no es de mi agrado. Ya vez que se han suscitado señales, catástrofes y portentos que van dando indicios de lo que se avecina. Es necesaria la unidad de todos para entender como hago las cosas. Una sola fe, una sola Iglesia, un solo redil, un solo Pastor, una sola Señal. Entienda el que pueda. Tú debes propiciar la unidad, que cada bautizado busque la unidad, pero que esa búsqueda no sea vista como imposición sino como exposición. Otras cosas se dirán y no todas vendrán por este medio. Mi Madre habla y hablará, Ella les llevará a Mí. Tú solo mantente en Gracia y vive la santa alegría. Queda en mi paz.

Amen.

jueves, 15 de marzo de 2012

Los Presbíteros

Este mensaje es para los sacerdotes y seminaristas, si conoces a alguno, siéntete libre de imprimirlo y dárselo a leer pues Jesús quiere que un gran número de ellos lo lean. Fue recibido el 18 de agosto de 2008.




Señor Jesús. La experiencia vivida ayer fue muy edificante, sorpresiva y ciertamente mística. No tenía idea que sería llamado a proclamar el Evangelio y mucho menos a explicarlo. Me sentí extraño haciendo esto frente a mis hermanos y frente a Fray L quien es Sacerdote. Pero aun más extrañado me sentí al escuchar su comentario a mi “homilía”, (lo pongo entre comillas porque realmente no fue una homilia) que más que homilía propia fue un pequeño extracto de la homilía de Padre J; “pareces sacerdote” me dijo. No es la primera vez que me lo dicen, pero claro, parecer y ser no es lo mismo.

+Cruz, el sacerdocio en ti es patente no por ordenación sino de ordinario. Actuar en mi persona no es exclusivo del Sacerdote Ordenado, pero sí lo es en el orden sacramental. Más tú no actuabas ni “ex cátedra” ni “in persona Christi”, sino que lo hacías como bautizado, como profeso, como Evangelio Viviente. A eso son llamados todos los hijos de Asís; a ser Evangelios Vivientes, y a ser Cristos en el mundo proclamando con su ejemplo la vida evangélica. Ciertamente, en ese proclamar con el ejemplo se proclama con la voz y a viva voz mi Palabra desde tu propia palabra. Quien te ve como Sacerdote hace cumplir la palabra que de ti he dicho, quien te vea a ti verá al Hijo, pues cada Sacerdote en el mundo representa a Cristo, es una visión del Hijo en su propia persona. Porque el Presbítero no actúa “in persona Christi” solo en la Consagración, sino que toda su vida debe ser un nítido reflejo de mi mismo.

Tu llamado a proclamar el Evangelio entonces no fue herético, ni blasfemo, todo bautizado puede proclamar la Palabra de Dios. Y tú eres profeso y vice- ministro, al menos por ahora, lo que te da la autoridad, pero aun sin esos títulos la tienes. Eres bautizado.

Señor ¿A qué te refieres con la expresión “al menos por ahora”?

+No hay perpetuidad en los títulos mi bien. No serás vice- ministro siempre, podrás ser más o podrás ser menos. Puedes ser madre o hijo, puedes ser maestro o estudiante, puedes ser comunitario o anacoreta. Teólogo o apologeta, no importan los títulos sino el servicio.

Así mis presbíteros deben ser servidores y no ser servidos, no importa su título. Aquel que ostente titularidad más alta más debe servir, pues dicho está que el que desee ser el primero debe ser servidor de todos. Aquel que desee entrar primero será retrasado hasta el final, y el que desee esperar hasta el final, aun sin quererlo será llamado primero.

Un Sacerdote tiene una gran encomienda Cruz, no solo la que exige su obediencia a Mi Iglesia sino la que exige su vocación de imitarme. ¿Quién ha de llevar mis sandalias sino aquel que camine mis pasos? Ya en ello, Cruz, la tarea pareciera ardua. Pero mi carga es ligera y mi yugo es suave. Vengan a mi los que tengan esas inquietudes sacerdotales y notarán que las espinas del camino siempre son perfumadas con rosas. Ah, pero es necesaria una entera disposición, una completa sumisión a mi Voluntad que es idéntica a la de mi Padre. Un sacerdote soberbio recibirá en justicia aquello que se equipare a su iniquidad. Pues se exige más a quien más se la da. Por ello es necesaria mucha oración Cruz, por los que tienen inquietudes sacerdotales y por aquellos que ya ejercen el presbiteriado. Para que sea fructífera su entrega y consecuente con la verdad de su servicio.

Os hablaré a vosotros hijitos míos que en su deseo de imitarme procuran los beneficios del cielo. Estén atentos a mi Voluntad, vean su minimidad reflejada en un Crucifijo, siempre tengan uno cerca. En cada falla humana, mirad en el Crucifijo con mirada mística y ved como están vuestros pecados clavados conmigo en la Cruz del Calvario. Porque han de ser místicos pero apegados a mi enseñanza, no se desvíen ni permitan desviaciones en aquellos que pondré a vuestros cuidados. Sean buenas madres con ellos a pesar de que serán llamados padres, pues es amor maternal el que siempre y en todo lugar procurarán a vuestros hijos espirituales. Llevad a todos el pan, llevad a todos la palabra, que sea fecunda, que germine. Procurad la santidad en todos, procurad la perfecta formación en mi pueblo, procurad que aquello que aprendáis sea enseñado a todos, y que esa enseñanza sea consecuente con la simplicidad de los pequeños y con la erudición de los doctos. Que sea vuestro aliciente la caridad, la esperanza y la fe. Sed humildes conmigo y en mi, sed sumisos pero firmes, sed leales y flexibles. Orad siempre y en todo lugar, y tened siempre presente que las 24 horas del día debéis ser Cristo. Ser Sacerdote no es un trabajo, es una forma de vida. Ser Sacerdotes les identificará conmigo. No dejaréis de ser Sacerdotes al quitarse la sotana en vuestros aposentos. La vocación es perpetua. Tened esto presente, especialmente aquellos de vosotros que estáis en vías de comenzar el Seminario. Yo les encomiendo a mi Padre y les daré la fortaleza necesaria en vuestras oraciones, desvelos y sufrimientos ungiendo en el Espíritu Santo todo vuestro ser en su Ordenación. La Iglesia les necesita. Venid a mí. Y tened presente que si así lo determináis, estaréis imitando al Rey de reyes y al Señor de señores, por tanto espero de vosotros la ecuanimidad, sobriedad, respeto, y sobre todo amor que esta vocación supone.

Aquellos de vosotros que ya estáis en este camino sirvan las palabras que preceden como una renovación mística de sus votos; pobreza, obediencia y castidad. Pues ya sois pobres de espíritu y ricos en piedad, pues ya sois obedientes a lo que reclama el cielo y desobedientes a lo que reclama el mundo, pues ya sois castos en su cuerpo y fecundos en el amor del Amor.

¡Benditos los presbíteros que en su entrega sin medidas llevan, esparcen y comunican los bienes celestiales procurando en todos el mejor bien posible! Bendecidos sean.

Si yo pudiera ser Sacerdote mi Rey, estas palabras que preceden serían para mi de rezo diario, pero siendo que mi vocación es otra las acogeré desde mi apostolado para servirte mejor en la medida de mis flaquezas. Y para entender mejor a aquellos que has llamado al hermoso servicio sacerdotal.

+La Palabras que surgen de la Trinidad mi bien, siempre serán alimento para el alma no importa su condición, su estatura moral, su posición social o su vocación de servicio. Haré en ti como quiera, conforme a la Voluntad del Padre sin que eso suponga violencia a tu libertad sino asumiendo precisamente esa libertad que solo es plena en tu sometimiento a mi Voluntad. Queda en mi paz.

Amén.

miércoles, 14 de marzo de 2012

La Iglesia

Esto lo recibí el 29 de julio de 2008. Es interesante lo que me dice respecto a la Iglesia.

 
+Te preocupas mucho Cruz.

 
Si, mi Señor, me preocupo, primero porque siguen invadiéndome las ideas que de una forma u otra me desligan de la realidad como si con fantasía pudiera resolver mis problemas, y segundo porque intento con tantas fuerzas, limitadas por cierto, hacer valer lo que me dices, lo que has dicho al mundo y personas como esa alma no lo pueden comprender y ella dice que lo que tú le dices es contrario a lo que de ti percibo, o más bien lo que dejaste para la Iglesia no es compatible con lo que ella a experimentado contigo, y yo me pregunto; ¿No estará siendo engañada por el maligno, no se habrá vestido de ángel de luz para hacerla caer?

+Son muchos Cruz los que piensan cosas contrarias a lo que dejé en la Iglesia porque la Iglesia tiene distintos componentes; humanos (que son imperfectos) espirituales, eternos, perecederos, físicos, simbólicos. La Iglesia es una pero muchas, no porque Yo quiera muchas sino porque todos desean hacer de su concepción la verdad. Pero la verdad solo es Una. Entonces una la Iglesia, que es purgante y triunfante; que es humana y divina; que es santa y pecadora. No he dicho a esa alma nada distinto a eso, pero el no usar estas palabras la desconcierta porque para ella la Iglesia está en su ser, y Cruz ella tiene razón, más tú también. La Iglesia eres tú, en ese sentido está en tu propio ser y de hecho eres Templo de mi Espíritu. Todo bautizado entonces debe y es la Iglesia en sí mismo, eso hace de los elegidos la Iglesia triunfante, más la Iglesia purgante, aquella física y visible que contiene mi Tabernáculo, esa que es visitada, esa que tiene jerarquía, esa que instituí en la persona de Pedro, en su fe, en su testimonio, esa mi bien esa es la Iglesia Católica, ambas una, y una por mi deseo, por mi voluntad por mi designio. Nada ni nadie cambiará eso. Yo estoy en todas partes, y aquel que invoque mi nombre con corazón contrito tendrá los beneficios de mi presencia, pero te pregunto y medita con calma y discernimiento certero. En mi Resurrección bajé a los infiernos y saqué de allí las almas que murieron sin conocerme pero viviendo mis pasos, fui allí a dar la última estocada a la muerte y a rescatar las almas que no debían estar en ese estado. ¿Supone eso que en el infierno está la Iglesia? Míralo de este modo, los animistas ven en todo lo creado un ser divino, y no se equivocan del todo pues lo creado tiene en su esencia la esencia de mi ser, no existiría nada si no fuera así. Lo que existe, existe por ser contingente a mí. Más no supone eso que lo que existe sea divino en sí mismo, entonces es contrario a la verdad decir que en el animismo está la verdad. Pero yo estoy presente en cada culto animista. No te alarmes, yo estoy presente en todo lugar, y eso no hace del lugar la Iglesia. Viéndolo más claro aun, cuando en las iglesias no católicas se invoca mi nombre con verdadero amor y entrega, Yo respondo del mismo modo. ¿Eso hace a esas iglesias las verdaderas? Pero si te dije que la Iglesia es una, ¿cómo podrían serlo? La confusión Cruz está en que no comprenden los alcances de mi Misericordia, y no comprenden que en cada culto contrario a mi deseo dan mayor poder a quien no lo tiene. Hay personas, que conocen la Iglesia pero por situaciones en su vida me buscan por otros medios, medios humanos e imperfectos. Más Yo hago de lo imperfecto perfección y les amo sin medida. Pero amo de igual modo a los sodomitas y eso no supone que apruebe su conducta. ¿Entiendes? Que Yo arrulle a quien me pide consuelo, no presume una sustitución sacramental, y que no se entienda tampoco que no hago santo lo que toco, pero lo instituido, instituido está para lograr la salvación de todos. Distinto es mí bien, que esta sacramentalidad litúrgica, eclesial y de culto suponga costumbrismo y rutina. Ya te he dicho que no deben ser los rituales aliciente para nadie, especialmente para las columnas. La costumbre no converge en amor ni proviene de él. Es amor lo que pido Cruz, amor sin medida, sin distancia, sin costumbre, renovado y revivido siempre. Aquel que se reúne, se congrega, asiste a la Iglesia no por amor sino por cumplimiento, pues como dice la trillada frase humana, cumple y miente, en ello sirve a dos señores y no hay posibilidad alguna de constancia en un amor dividido pues éste no es amor. Distinto es sin embargo el que asiste por amor, por entrega, por necesidad de Mí, y si lo hace allí donde di todos los medios salvíficos, mayor aun serán los méritos que por mis méritos reciba. No pueden desoír mis mandatos Cruz, Yo instituí una Iglesia, y en ella Soy Yo, y Yo mismo soy quien les recibe, nadie puede sentirse en la Iglesia si no tiene pertenencia en ella. Entienda el que pueda.

Por lo que me dices, quien no asista a la Iglesia pero se sienta en la Iglesia por amor, aun sin saber que se siente Iglesia, ¿puede salvarse?

+La Salvación tiene sus circunstancias pero un solo requisito; el amor. Quien ama cumple mi palabra, quien cumple mi palabra aun sin saberlo recibe los Sacramentos, quien recibe los Sacramentos se salva. Más quien entra en conocimiento de esta verdad y deja de asistir por creer que el camino sería más fácil sintiéndose Iglesia sin asistir a la Iglesia, ese tal engaña y se engaña, ese tal miente y quien miente no ama, quien no ama no cumple, quien no cumple se desliga de Mi, quien no está conmigo no puede conmigo reinar.

Entonces no es tan sencillo como esa alma lo entiende, ¿te puedo pedir un favor? Hazlo saber a su alma, pues no quiero que luego de tantos viajes por tus jardines se quede fuera de ellos y su vida futura sea un constante rechinar de dientes.

+Todos lo han de saber Cruz, a todos se lo informo de una manera u otra, a todos les hablo y a todos amo con infinito amor. Quiero que todos se salven y en ese sentir misericordioso de mi ser se prolongan los días en el tiempo de la humanidad que de otro modo no sería ya. Tú tranquilo, que ya le has hecho reflexionar muchas cosas y muchas cosas me pregunta buscando consenso, buscando afinidad entre su alma y mi Espíritu. Todo a su tiempo Cruz, todo a su tiempo.

Es bueno saber eso mi Señor, pensaba que estaba siendo engañada.

+Pero es así Cruz, tú también recibes embates del maligno todos los días. Pero mis columnas serán preservadas de todo lo malo, muy a pesar de ellas mismas. ¡Discierne!

Creo entenderlo. Me viene a la mente, ya que hablamos de Iglesia, ¿Qué hay con San Judas en la Habana?

+Ahí estoy como en todas las Iglesias que contienen un Santísimo, Tabernáculo de mi ser. Pero tal como en la eternidad no hay tiempo, tampoco hay espacio. Es por ello que un solo y único sacrificio pareciera multiplicarse en el tiempo y el espacio de la historia humana y cristiana en cada Eucaristía. La presencia de esa alma privilegiada en esa Iglesia particular, hace evidente la espiritualidad que deja entrever la eternidad en ella. Por eso te ve, te siente, y a tantos otros. Lo que experimenta mi amado F es una realidad que todos deberían ver. El cielo baja a la tierra en cada Eucaristía, y la Eternidad inunda cada ser consagrado y comulgante, entonces aun sin saberlo estás allí desde la Eternidad, y también las columnas, y para tu tranquilidad todas las columnas están allí, todas. F trata de comprender con mente limitada por la debilidad de su humana existencia la eternidad que se le presenta y puede ver unas veces y otras no. Entonces no se diversifica, divide o parte el Sacrificio único y Santo del Calvario, sino que todas la Iglesias del mundo en ese instante perpetuo participan unificadas a esta verdad, y en esa participación eterna no están todos los que originalmente ve, porque no todos perseveran, por ello su banco lleno luego pareciera vació. Ahora que lo lea lo entenderá y notará que siempre lo supo pues él conoce lo que se ha revelado del misterio eucarístico.

Sobre tus preocupaciones Cruz, ya verás como se diluyen en la medida de tus acumulaciones de riquezas celestiales. Vivir en el tiempo tiene sus limitaciones, y ya tú las quisieras dejar atrás, pero aun falta para eso. Vive, ama, sirve y persevera, lo demás déjalo en mis manos. Queda en mi paz.

martes, 13 de marzo de 2012

La entrega

El Señor Jesús me habla de la entrega verdadera. Esto lo recibí el 17 de junio de 2008.




Mi Señor Jesús, hace unos días que me llamas a escribir, mis ocupaciones lo impedían, no me justifico, ¿cómo hacerlo ante ti? Solo trato de comprenderme a mi mismo. Tu me llamas y yo me resisto… y esta tristeza que ha de convertirse en alegría no me abandona mi Señor…lloro amargamente que no pueda servirte como lo ameritas…lloro mi Rey porque no puedo hacer lo que me pides hacer…Mira como este mundo se va desboronando, viven sin ti, como si no existieras…y yo…yo nada hago al respecto cuando debería gritar a los cuatro vientos; “Soy la Cruz de Luz y he sido enviado por Dios para que este mundo pecador cambie y se convierta”…pero no puedo Señor, mi fe no es robusta. Mira mi Señor como se va convirtiendo el mundo en una Gran Sodoma y Gomorra…no hay temor de ti y se justifican en un falso amor que solo oculta una pasión y una aberración. Y yo nada hago…pero asumo que ya lo tenías previsto, tú me escogiste precisamente por lo que soy y no por lo que seré. ¿Es así verdad?

+Cruz la desesperanza del mundo les lleva a cometer errores, uno tras otro. Vivir sin mi es imposible para los hombres, pretender hacerlo si lo es. El engaño caló hondo mi bien, por ello llevan la marca del pecado en su propio ser. Tú no necesitas protagonismo, tú haces lo que tienes que hacer y así ha de ser para que haya verdadero propósito de enmienda. Cruz la entrega no se hace por la fuerza, la entrega no supone coacción sino libertad. Quien se entrega lo hace voluntariamente, si Yo permitiera que tú hablaras con poder al mundo el mundo tendría pánico, miedo y temor. Tú hablas con otro poder hijo, el poder de las locuciones, las visiones y los milagros que te permito escribir. Tú debes seguir haciendo lo que haces, evita el pánico, evita el miedo, procura que el temor a Dios sea por devoción no por coacción. El amor mi bien, como te he dicho en otras ocasiones no se puede forzar porque dejaría de serlo. Tus palabras al mundo propiciarán el cambio pero no por tu poder sino por el mío. Ya mi Madre y Madre tuya avisa, denuncia y profetiza sobre lo que ha de venir, tú como precursor del camino al Camino haces lo que te dicto solo con escribir, orar, predicar, aconsejar. En esto mi bien no debes preocuparte, son los que hablen contigo, los que lean, los que reciban de ti oración, consejos y sean depositarios de los milagros que por intercesión tuya recibirán de mi, esos mi bien, esos serán las que siendo testigos de la Verdad, hablarán al mundo de la Verdad y verán en ti al Hijo.
Cruz, ya ves como la flor del desierto te busca como buscando beber de la fuente y así poder germinar. Dudas tienen todos, certeza hay solo en mi. Volved a mí su mirada y encontrareis la verdad. Mirad y ved que bueno es el Señor, inspiré una vez al salmista porque la Verdad es esa. Solo Yo soy bueno y es en mí que se desborda la bondad. Venid pues a la fuente de la bondad hijos míos venid. Yo os saciaré de gracias y bienaventuranzas y los sinsabores del mundo no les acogerán.
Todos esos pecados que se van multiplicando en estos días donde la carne del hombre busca saciarse con la de otro hombre y la mujer busca caricias en otra mujer, serán castigados severamente. Pero al pecador, a ese Cruz lo llenaré de las abundancias de mi Misericordia para que reciba el perdón. Las aberraciones del mundo no serán perdonadas Cruz, pero los pecadores arrepentidos recibirán de mi Misericordia la Justicia y de mi Justicia la Misericordia. Entienda el que pueda.
Muchos que han encontrado mis caminos Cruz, aun parecieran perdidos porque no han hecho de su vida una verdadera entrega.

¿Qué o cómo es una verdadera entrega mi Señor Jesús?

+Una verdadera entrega es aquella que parte de la minimidad, es aquella que busca la alegría del amado y en ella consigue su complacencia, en ella consigue su alegría. Una verdadera entrega es aquella que parte de la fe, de la confianza, de la esperanza de buenas cosas que solo provienen del Dios Trino, único bueno. Una verdadera entrega no tiene ansiedades, tiene paz. Una verdadera entrega no tiene dudas, tiene certezas. Para ello mi bien, aquel que verdaderamente se entrega debe vaciarse de sí mismo, como te he dicho en otras ocasiones, y debe ir a la fuente donde manan todas las bondades y llenarse, pretecharse de ella y así henchido de bonanza, repartirla a los demás. Llena el alma de gracias, los malos recuerdos del pasado oscuro no podrán ejercer su dominio en un alma que está en la Luz. Entregarse es amar y dejarse amar, pero no es intrigar, no es carnal, no es físico, es espiritual, es divino, es luz en sí misma. La entrega es un paso ascético Cruz por el que todos deben pasar. Tomad de ejemplo mi entrega a vosotros, vaciado de mí mismo y sometido enteramente a la Voluntad del Padre dejé toda mi sangre por vosotros, mi vida misma a cambio de la vuestra. Entregado completamente por vosotros, fui colmado de gracias de lo alto que ya poseía pero había descartado para vestir vuestra humanidad. Resucité, fui resucitado y llevado al Padre desde mí mismo para que por mí, vosotros tengáis vida. Entregadse pues sin reparos y confiados en que lo Revelado desde la Eternidad se hará realidad en vosotros, y viviréis en la Gloria de mi Padre por siglos sin fin. Paradigmas de esa entrega Cruz, he dado muchos al mundo. Todos aquellos que me siguieron, pero muy en especial Aquella que escogí desde siempre para por medio de Ella venir al mundo. Sigue sus pasos Cruz, ve de la mano de mi Madre que es tierna, suave y dulce. Ella hermosa entre las hermosas y santa entre las santas es el perfecto paradigma de entrega a Dios. Mirad pues desde su Fiat, y ved que bueno es el Señor. Queda en mi paz Cruz.

Amén.

lunes, 12 de marzo de 2012

Segundo coloquio con Jesús

El 20 de mayo de 2008 Jesús habló conmigo otra vez de forma mas coloquial, aun así dijo cosas que me desconciertan. Máxime cuando veo que las dice de forma distinta a otros pero en la misma esencia. Aquí lo explica Jesús de forma meridanamente clara. Yo represento a la humanidad en estas locuciones por ello lo dicho a otros es consecuente con lo que me dice a mi. No es que me hable a mi en un protagonismo individual, sino que me habla de forma global para toda la humanidad. Veamos.



Mi Señor, se que no me has pedido escribir, se que no debería pensar las cosas que pienso, se que no debería actuar como actúo, pero ni yo mismo lo entiendo. Llevo como dos años y medio recibiendo estas locuciones, y experimentando otro tipo de conversaciones contigo, toda mi vida ha sido un mar de cosas extrañas y otras que si bien no son tan extrañas conllevan algún tipo de misticismo. Una vida así no debería ser tan desordenada, no comprendo Señor como es que mi vida no se traduce en, y perdona la soberbia, no se traduce en santidad. Sigo siendo tan pecador. Sabes que oro con mucha frecuencia, otras tantas ayuno, sabes que ayudo a quien puedo, sabes que me intereso por vivir conforme al Evangelio, la sana Doctrina, el Magisterio, pero aun así me sigo sintiendo indigno Señor de vivir esto. A veces pienso que es un hermoso sueño, y más de lo que debería pienso que es inducido por un deseo interno de santidad que nunca alcanzaré. Muchas veces he tenido estas preocupaciones, y tú me pides ser perfecto, me dices que el camino se hace caminando, pero sigo como sumergido en un mar de incomprensiones viendo como en tinieblas y atrapado en mis propios pecados. No quisiera que estas locuciones escandalicen a nadie, no quisiera que los que leen se preocupen más de la cuenta, lo que sucede en mi interior es bastante comprensible conforme a lo que vivo. Me refiero a que es comprensible que esté confundido, dividido en mi interior y parcialmente ciego ante las realidades espirituales, que si bien otros no comprenden y yo intuyo, nunca las comprenderé del todo. Espero Señor escuchar tu voz y en ella encontrar paz en mi interior.

+Cruz, la santidad no es una carga fácil de llevar. ¿Qué no has intuido ya que la santidad es en si misma una cruz? ¿No comprendes aun por qué te llamo Cruz de Luz? La santidad mi bien, es un constante purgarse en el fuego, tal como has leído sobre la purificación. La santidad es como el hierro que fundido al fuego adquiere su propiedad sin dejar de ser hierro, que retirado a tiempo puede ser moldeado y que llega a su punto cuando refleja la imagen del fundidor. Yo soy pues el fundidor, así lo descifró el Sacerdote de quien he tomado mis palabras, pues son mías y no suyas. Tú hijo, estás pasando un purgatorio en la tierra, estás siendo purificado constantemente y en tantas ocasiones reflejas mi rostro como en tantas otras debes ser sumergido a un punto de mayor calor para que haya nitidez en el reflejo. Recuerda aquello del espejo Cruz. Las grandezas del cielo, mi bien, te quitarían la vida terrena ipso facto si Yo permitiera que las vieras del todo, y el plan eterno que te cobija no permite esa muerte terrena aun. Por ello sigues vedado de mucho aunque has visto más que otros. Aquello que te sea más placentero, más hermoso, más alegre en esta vida no se acerca siquiera a una ínfima parte de lo que te espera en la Eternidad. Entonces, sí te he pedido perfección, pero no supone eso que esa perfección sea material sino interna. Claro que debes cuidar tu cuerpo, claro que debes fortalecer tu fe con ejercicios espirituales y mucha oración, claro que debes atender los rituales y cultos, pero nada de eso debe ser motivo de frustración. Eres libre hijo y en esa libertad debes moverte, por eso he dicho que no sean los rituales tu aliciente. Yo soy el único aliciente que hace libre a los hombres. ¿Te esclavizaré en rituales y sacrificios cuando te digo que eres libre? Solo un sacrificio mi bien, solo un ritual hecho en conmemoración mía pues en éste perpetuado se hace presente la Iglesia Celestial en la Iglesia Purgante. No mal entiendas Cruz, todo ritual sacramental es necesario para la vida de gracia que les doy, pero los rituales que establecen conforme a ellos, alrededor de ellos y sujetos a ellos, no tienen la menor importancia para mi si se realizan desde la costumbre y no desde la fe. Por ello les he dicho que lo que pido es fe y no sacrificios. Más todo aquello que suponga un sacrificio desde la fe, eso mi bien, eso llega hasta el Trono de mi Padre como incienso y perfumes de inmensos olores de santidad. Entiéndelo pues.

No es fácil de entender, aun con esta conversación que he tenido con aquella hermana que confirma todo lo que me has dicho. ¿Hablabas con ella entonces respondiendo mis reclamos?

+Cruz, recuerdo haberte llamado Juan un día, ¿lo recuerdas tú?

Lo recuerdo mi Señor.

+ ¿Crees que lo hice porque sonaría bonito? ¿Crees que lo hice para compararte o ensalzarte? Lo hice mi bien, porque eres representante de la humanidad, quien lea estas locuciones y no se siente inmensamente identificado no es humano. Tus reclamos son los de todo traspasado, y de todo aquel que no lo es todavía. Cada hijo de Dios se siente indigno cuando se hace conciente de las realidades de la fe, cuando comprende aunque sea por un instante cuanto les amo, cuando recuerda los pasos dados en este camino de la vida humana y recapacita en cuantas de esas ocasiones Yo he estado a su lado. Si supieran que no me despego de ustedes nunca. Pero las leyes físicas les sujetan tan fuertemente que cuando ejercen su ingerencia las verdaderas leyes del existir, lo humano es dudar, lo lógico es confundirse y no dar crédito a la única verdad. Toda otra verdad de la física es variable. No existe una sola verdad de las leyes físicas que sea constante, y no puede serlo porque el mundo físico es perecedero. Solo una ley es verdadera y es la del amor. Muchas veces lo he dicho y aun muchas veces lo diré. Todo se resume en amor mi bien. El ser humano se caracteriza por su capacidad de amar, Juan fue y es mi discípulo amado, y allí en la Cruz que eres tú representó a toda la humanidad. Mira hijo acércate a este misterio; la Cruz, Yo, Juan, mi Madre, ¿no suman cuatro? ¿No es el Espíritu Santo uno en mí? Entonces cinco en cuatro tal como las columnas. Todas representadas en ti mí bien. ¿No lo ves? Te lo muestro; Tú eres la Cruz y en la Cruz pendo Yo unido a ella por la sangre, Mi Madre y mi hijo amado Juan al pie de la Cruz. Tu corazón idéntico al de mi Madre y tu candidez una con la de Juan. La Pasión se hace una sola en la Crucifixión en ti por medio del Espíritu Santo. Lo dije una vez, en una unión no genética, ¿lo recuerdas? Todo el que lee se debe identificar, pues tú siendo representante de la humanidad y siendo el Apóstol del Sufrimiento, cargas en ti, tal como lo hice Yo, los pecados de los hombres. El Cristo ha de sufrir, ha de padecer, ha de ser rechazado, pero luego será amado por todos y todos serán en Él uno, como es Él uno en el Padre por medio del Espíritu Santo. ¿De quien hablo Cruz, de ti o de mí?

De ti por supuesto.

+Hablo de ambos Cruz, y aun no lo comprendes, o te resistes a comprenderlo.

¿Qué es lo que debo entender Señor?

+Que en ti Cruz se cumple el tiempo designado por mi Padre para que el mundo cambie.

Ahora entiendo menos.

+Ya lo entenderás. Sigue viviendo conforme te voy mostrando. Todo llegará a su tiempo. Queda en mi paz.

Amen.

domingo, 11 de marzo de 2012

¿Hasta cuándo?

El 9 de mayo de 2008 Jesús me dictó esta Locución en la cual expresa claramente que quien lea las mismas debe asumir que se le habla directamente. Lo dijo muy molesto por la incredulidad de algunos respecto a éstas. Veamos.



+Cruz, te pido que escribas y atiende bien, todo lo que se desprende en este momento de mis labios tiene un propósito que entenderás luego. No descartes nada, no cambies nada, escribe tal como lo digo. Se que nada cambias de mis dichos pero en ocasiones temes escribir lo que entiendes y buscas palabras más acordes según tu entendimiento. No hagas eso en esta ocasión, pues mis palabras son duras con un propósito determinado.

Noto en tu voz una seriedad que no había notado antes, ¿estás molesto conmigo?

+Me molesta la humanidad Cruz, me molesta su indiferencia, me molesta tanta incredulidad. Vamos, que si os hablo con suavidad por medio de este mi instrumento, les gusta y hasta imaginan los angelitos y los sonidos celestiales, más si con fuerza me expreso en relación a Cruz, si le dejo ver cosas que le humillen, si le permito escribir mis adulaciones, entonces pensáis que necesita ayuda. El pobre podría estar loco. ¿Qué os pasa? ¿No se dan cuenta que es en esa su imperfecta humanidad que se refleja la perfección divina? Nunca he pedido que crean en Cruz, sino que crean que lo que Cruz recibe viene de mí. Nada de él, todo de mí. Recuerdo haberos dicho que no confíen en el enviado sino en el que envía. Creer tiene sus parámetros. Creer no es solo tener fe, pues yo puedo creer en vosotros y eso no quiere decir que tengo fe en vosotros. La fe es mucho más profunda que creer. Crean en Cruz por lo que dice, por lo que vive, por lo que padece, pero tengan fe solo en Dios. Es muy molesto hijos que cuestionen la procedencia de las locuciones, pues lo que realmente cuestionen es a Aquel que las envía. Yo puedo hoy decidir no usar más a Cruz para esto, y dejaros desprovistos de estas noticias que discernidas contienen mensajes importantes en estos últimos días. Puedo decidir llevar este mensaje a otros y no a vosotros. Pero no lo haré porque los amo y deseo que se unan a mí en gracia y verdad. Más la incredulidad os corrompe. Siempre han sido así. Cuando hablé en este mundo y enseñé la Doctrina no pedí que se escribiera nada, pero hubo la necesidad de hacerlo por el bien de los que no estaban allí cuando hablé. Entonces se escribió a favor de vosotros. Pero aun así no creen, no comprenden y aluden al hombre las palabras que fueron inspiradas, hacen lo mismo con Cruz y así han hecho con todos los enviados de mi Padre, Yo incluido. ¿Hasta cuándo? Y pregunto conociendo la respuesta, teman vosotros de esa respuesta y acójanse a mi Santo Nombre y a mi Preciosísima Sangre pues será severa la justicia con esta generación llena de incredulidades. ¿Qué pensaban? ¿Vosotros pensasteis que me quedaría tranquilo luego de ver sus pensamientos? Vosotros leen y al no comprender lo que permito a este hombre vivir, hacen mofa de su fe. ¡No se justifiquen! Pues he visto lo que han pensado. Pero es así que debía ser, ¿cómo sería un apóstol del sufrimiento, sino sufriendo? Pero, lean y disciernan, esto es para vosotros, cada uno es una Cruz de Luz en sí mismo y su mofa se les devuelve. ¿No se han dado cuenta? Entended esto pues Yo lo he venido diciendo harto tiempo ya. Lo que está contenido en estos escritos supone en quien lo lee un convertirse en la Cruz. Este mensaje es para todos los que de vosotros leen en los mismos y tratan de imaginar que no es a vos a quien hablo. Se auto engañan si así pensáis. ¿Qué no entienden que lo que dicto a Cruz supone una auto evaluación de todo el que lee?
Es a ti a quien me dirijo, a ti, entiéndelo. Hablo con vos. Tú que estás leyendo ahora. ¿Pensad que Cruz es especial, por lo que vive, por lo que digo? ¡Pero si es a vos a quien me dirijo! Tú eres el especial, Yo te amo. ¿Hasta cuándo te he de esperar? Estoy aquí hijo, hija, te espero. No dudéis más acercaros, aproximaros a mi corazón glorioso y el vuestro será traspasado. No juzguéis en sus adentros sobre los escritos, no dudéis que Yo pueda hablar a quien quiero y cuando quiero. Cuando el maligno intenta proponer en el corazón de Cruz engaños y desviaciones Yo lo repruebo, y si bien permito esos desvíos siempre arreglo los caminos aun los torcidos, así que no penséis que alguno de estos escritos no provenga de la Trinidad, pues si así lo entendéis, se equivocáis. Yo soy, quien dicta a Cruz estas palabras. Y las dicto para vosotros porque no dejo de pensar en vosotros y quiero que vosotros nunca dejéis de pensar en mí. ¿He de seguir esperando o finalmente será esta generación la que promulgue el cambio? Esta en vosotros hacerlo. Hablan de la fe sin conocerla, les presento la fe.
La fe es una de mis hijas predilectas, no cuestiona, no juzga, no discrimina, no es aduladora, no miente nunca, siempre confía. Es tal como la sabiduría, es tal como la pobreza, es tal como la humildad y en todas ellas se manifiesta como una virtud. La fe es la más importante de las virtudes siendo inherente a la caridad y a la esperanza. Pero quien no la conoce la confunde con el creer, y el creer es muy tímido, es tonto, se deja engañar, no tiene autoridad virtuosa. Es tal como el querer y el amar. Todos quieren, pero no todos aman. ¿Hasta cuándo se dejaran engañar por el querer y el creer? Yo les muestro la fe y el amor y vosotros se limitan a creer y querer. ¿Hasta cuándo?

Señor, te pido perdón, yo soy el primero que duda, te pido perdón también por ellos. No tomes esto en cuenta Jesús mío, somos imperfectos e incrédulos y ciertamente indiferentes. Más Señor Jesús, sabes bien que vemos de manera velada los frutos del Espíritu. No podemos entender estas cosas Jesús mío. Tu que eres paciente y misericordioso, Señor, te pido que nos perdones. Yo no soy merecedor de tus gracias, y si es tu menester que no vuelva a recibir las locuciones lo entenderé. De hecho sabes que te lo he pedido precisamente por no poder entender. Soy un recipiente quebrado Señor y tu Gracia se escapa por las grietas de mí ser, y no puedo servirte como lo merece tu Majestad. Perdóname.

+Cruz, porque eres una vasija rota es que te uso. Porque eres un ser imperfecto es que te escogí, porque ya se había predestinado. Pero Yo hice un pacto con la humanidad y contigo, y tú aceptaste de buena gana. No te retractes, se perseverante, tienes mi perdón. Yo comprendo tus flaquezas mi bien, Yo mismo las he vivido. No creas que estas palabras supongan un juicio sino un proceso de conversión, el Juicio, créelo, será distinto y si bien será más severo por justo también lo será por misericordioso.
Entended pues que mi pregunta, “¿hasta cuándo?” quiere de vosotros un compromiso, quiere de vosotros una entrega, quiere de vosotros una completa adhesión a mi Palabra. Quiero de vosotros que podáis vivir de conformidad a mis designios, aquellos contenidos en el Evangelio. No debéis creer ni en Cruz ni en las locuciones para salvarse, pero jamás dejad de tener fe en Aquel que las dicta, pues ahí sí les va la salvación. Seáis santos, procurad la perfección y no seáis incrédulos sino creyentes. Quedad en mi paz.

Amén.

sábado, 10 de marzo de 2012

Corazón Traspasado

Esta Locusión recibida el 5 de mayo de 2008, fue en respuesta a una alegría recibida, el haber sido partícipe de la ilusión de una hermana que acababa de bajar de un Cursillo de Cristiandad. Jesús instruyó a un ángel a traspasar mi corazón miestras recibía el mensaje. La experiencia no se puede poner en palabras.




Jesús, mi Señor. Aclamo a ti con agradecimiento y regocijo por esa alma que recién habló conmigo. Tú la llamaste, tú la acogiste, tú la esperabas. Misericordioso Dios Trino, ¿qué palabras podría usar para agradecer la felicidad que inunda mi corazón? ¡Gracias, gracias, gracias! Ella está radiante, feliz, irreconocible en su irradiación de ti, pues es a ti a quien refleja. ¡Loado seas mi Señor! Ella apesumbrada y llena de angustias con toda la imperfección de su humana existencia se humilló ante ti y tú la recibiste como a una reina. ¡Qué hermosa experiencia tuvo contigo este fin de semana! ¡Qué hermoso se siente que viniera a contarme su encuentro contigo! ¡Gracias! ¡Bendito seas mi Señor! ¡Alabado por siempre tu Santo Nombre! Su felicidad es ahora mía también Señor, e imagino la fiesta en el cielo. Gracias otra vez. No tengo más palabras para agradecerte.

+Cruz, feliz estoy con tu felicidad y la de ella y también la de las otras 37 y todos los que estuvieron orando por ellas. Trato con cada una de ellas de manera especialísima, mi bien. Ya vez como su rostro brilla como brillaba el de Moisés. De manera alegórica lo digo como alegórico es el ardor en tu pecho y el palpitar de tu corazón traspasado por mi amor. Te preguntabas antes que ella llegara por qué habías dicho a Fray A. lo que dijiste cuando lo abrasaste ayer, solo ahora lo comprendes. Es tu amor uno con el mío, más bien el mío se hace uno en ti. Le hablaste por mí, como una vez yo te hable a través de él. Repetiré esas palabras para el beneficio de las columnas pues ellas deben repetirlas en cada momento que sea necesario, en cada envío, en cada despedida, en cada abrazo fraterno que preludie una separación; “Yo estoy en tu corazón y ciertamente tú estás en el mío”. No cometiste imprudencia alguna al decirlo, pues fui yo quien habló. En cada oportunidad que me permite la apertura de tu alma, permito al ángel que punce tu corazón con la lanza de mi amor. Será indescriptible el dolor cuando la lanza atraviese completamente tu corazón mi bien, pero en la imitación de mi proceder amoroso no puede tu corazón sino estar dividido por los hombres, en atención a los hombres, y cada pedazo como uno solo palpitando de amor insondable por los hombres. Es su deber proceder de igual modo, os mando a hacerlo. Hacedlo con cada hermano o hermana que fundan en un abrazo de envío, hacedles saber que siendo vosotros un reflejo mío sus palabras de igual modo suponen las mías cuando su alma está dispuesta al amor. Cuando digáis “Yo estoy en tu corazón”, debéis hacerlo desde el amor pues Yo Soy el amor, entonces y solo entonces vuestras palabras serán las mías. Cuando digáis; “ciertamente tú estás en el mío”, estáis diciendo que mi amor no les abandona, aun en vuestras incredulidades aun en vuestras flaquezas, aun en vuestros vicios. Yo les amo y mi morada es vuestro corazón. Ya ves Cruz por qué esa alma que te alegró la mañana con su alegría te dejó saber que mi misericordia no tiene límites. Solo ella y yo conocemos las desventuras que ella quiere olvidar, y Yo se lo permitiré, pues la amo por lo que es y no por lo que haga. Así os amo a vosotros, porque sois hijos de Dios no por los pecados que puedan cometer. A esos, los pecados, los aborrezco los rechazo con todo mi ser, pero no por ello dejo de amaros, pues mi amor por vosotros solo se comprende desde la Cruz. Ese mi amor se hace en vosotros una lanza de fuego que os atraviesa el corazón tal como hago con Cruz. Permitidle a mi amor traspasar vuestro corazón para que encandecido de amor pueda trasmitir amor a otros. Abrid pues vuestra alma al amor divino y encamínense a la perfección pues no es solo a Cruz que le compete andar ese camino sino a cada uno de vosotros. Caminad el camino del calvario que no hay otro que os lleve a la perfección. Purificad vuestros corazones con la llama de mi amor y una vez traspasado con la lanza de la caridad, con el filo de la esperanza y en el hasta de la fe poderos convertid en nuevos Cristos que han de andar en los senderos de este mundo de dos en dos llevando mi mensaje. Y el mensaje es este: “Arrepentíos hijos del mundo han llegado los traspasados de Dios que traen la buena nueva. Arrepentíos y clamad misericordia pues se acerca el día de la justicia. Arrepentíos y clamad justicia por los que han fallecido en desagravio. Arrepentíos y seáis penitentes, que el tiempo de la siega se aproxima. Arrepentíos y permitid al amor del Amor que haga de vuestros corazones un blanco donde sea traspasada la lanza de fuego que purifica y perdona.”

Un corazón traspasado Cruz es un amor penitente, es un corazón que ama con el amor de mi Madre Castísima, es un corazón que no envidia, que no anhela sino el amor del Amado, que no sobrepasa sus límites, que no busca ser consolado sino consolar, como he mostrado a mi pequeñuelo de Asís. Un corazón traspasado es aquel que irradia a Cristo en sus hazañas. Quien observa a un corazón traspasado ve en él la imagen de mi Ser, pues traspasado el corazón no se puede sino amar, y el amor es infundido por mi que Soy el Amor. Traspaso pues tu corazón Cruz y en cada penetración de la lanza el dolor será extasiante, en cada punzada podrás ver la Gloria que se abre para los hombres, en cada lanzada el cielo se verá en su plenitud por un instante y comprenderás como el amor desde la Cruz no podía sino perdonar a los verdugos que amaba con tanta pasión. Oh Cruz si vieras como amo y como he de amar todavía, y en verdad te digo que lo verás desde la Cruz, y en ella serás traspasado con la lanza del soldado para derramada la sangre y el agua, sea redimido el mundo desde éste único sacrificio mío y también tuyo. Encarnado en ti desde la Eucaristía y desde la Pasión, tal como mi buen representante les dijera en las pasadas festividades de la Pascua. Del Pesebre a la Cruz y de la Cruz a la Luz. Entienda el que pueda.

Vive pues Cruz esa alegría que me agradeces y que se note a otros de igual forma que ella la irradió en ti. Sigue siendo hombre de oración, y no la abandones pues mucho que te hará falta en lo venidero. Pronto te mostraré mi Pasión con mayor nitidez, no ceses en la oración para que no te turbe lo que has de vivir y lo que has de ver. Pues ya ves que toda alegría conlleva su pena, y toda pena nos debe llevar a la alegría. Has de purgar algunas penas en esta vida como has purgado ya, pero mucho te falta aun. Ora, se perseverante, se persistente, no desfallezcas Yo estoy contigo.

Señor Jesús, de nuevo gracias por todo esto y por ese mensaje que hemos de llevar. Quisiera preguntarte, bueno serían muchas las preguntas, pero solo haré dos: La hermana M. ¿finalmente se consagrará a ti en otra familia franciscana? Y sobre la rosa del desierto Señor, ¿cuál es su misión concreta?

+En el desierto existe tanta vida Cruz, se adapta a situaciones inhóspitas y ni el calor o el frío la doblegan. Tras las rocas, debajo de ellas, en la arena o en los pequeños arbustos que puedan formarse, ahí está la vida en el desierto, donde el agua es limitada y ciertamente es el agua la fuete de toda vida, pero el desierto se lleva la mejor parte Cruz ¿sabes por qué? Porque puede almacenar la fuente de la vida en sí mismo sin importar su aridez. Por eso florecen rosas en el desierto, unas vegetales y como has descubierto, otras minerales. Es en el mineral que se oculta la fuente de la vida en pequeñísimas partículas que manan no a raudales sino en su justa medida para mantener la vida y la belleza. Más cuando el agua se manifiesta en el desierto, sus frutos son abundantes. Lee y discierne.

La primera pregunta solo tiene una respuesta Cruz. Yo la llamo y ella responde. Queda en mi paz.

De nuevo gracias mi Señor. Amén.

viernes, 9 de marzo de 2012

¿Querubín o demonio? / Sobre la Perfección

El 22 de abril de 2008 tuve una visión relacionada a algo que había soñado días atrás. Fue al mismo tiempo perturbador y fascinante. Entre mis quejas hago una descripción de la visión, básicamente recojo mi pensar y sentir en ese momento. Solo lo incluyo aquí por la respuesta que llegó 8 días después. Algunos datos de la visión fueron eliminados.




¡Qué muchas cosas quisiera saber, qué muchas otras quisiera comprender, pero todas ellas están vedadas y ocultas! ¿Cuánto tiempo más he de esperar, mi Señor? Sigo confuso y no entiendo si esto que me hace pensar que voy a crecer, a transfigurarme es una tentación o una premonición. Sigo confundido entre querer y asumir, entre el deseo y la abstinencia, entre la fantasía y la realidad. Leo las locuciones y no puedo negar su certeza en muchas cosas, pero en tantas otras me pareciera que pudiera ser un autoengaño del que por algún motivo no puedo escapar. Todo esto sucede en mi vida en momentos en que tener un director espiritual fijo se me hace imposible. Monseñor F. no me ha llamado y comprendo que así sea. Él, más que mi director espiritual es la persona que estudia lo que me pasa, debe ser imparcial y en cierta medida no debe involucrarse. Por otro lado su cargo le mantiene muy ocupado como para atender mis lagunas. He tenido que batallar prácticamente solo con esto, y de verdad estoy cuerdo por Gracia de Dios, por tu Gracia mi Señor, luego de ver y escuchar todo lo que veo y escucho. Esta mujer que veo ahora, hace unos días atrás, que dice de sí misma que es un Querubín me desconcierta, su belleza es atrayente pero del mismo modo enigmática. ¿Puede un ser angelical mostrarse de esa manera a los hombres? No tengo precedentes de algo así salvo las leyendas y mitologías. Sus palabras confirman cosas que pasan o cosas que sueño o cosas que siento desde siempre, no las noto muy lejanas a la doctrina. Solo lo de la perfección física previa a la espiritual me tenía en dudas, pero ahora comprendo que ella no decía nada contrario a las enseñanzas doctrinales. La respuesta vino por parte de P. J en la homilía del domingo pasado. El cuerpo es el templo vivo del Espíritu Santo por tanto debe estar en la perfección física que amerita tal huésped. La perfección espiritual la tendremos con la Resurrección. Ella no me mintió cuando dijo “debes ser perfecto físicamente para ser la señal, luego en la Resurrección serás perfecto también en lo espiritual”, entonces puede ser posible que provenga de Dios, de ti, pero… ¿Por qué se me presenta seductora? No seductora porque intente seducirme sino seductora porque su vestimenta trasparenta la desnudez de su perfecto cuerpo. Pero si es un ser espiritual, ¿por qué mostrar un cuerpo que no necesita? Sus palabras no las noto como cuando habla Assiel, sino de otra forma. Assiel me habla con sabiduría, ella lo hace como con misterio, como quien dice cosas entrelíneas, pero cosas que no logro captar. Si atiendo estrictamente a los simbolismos, su cabello blanco como la nieve y los ojos del mismo color, lo enorme de su tamaño, casi 8 pies, y la transparencia de sus vestiduras, muy a pesar de que esto podría despertar en mi un sentimiento contrario a lo que debería ser este tipo de manifestación, me dicen que viene de ti mi Dios, por la pureza, la grandeza y la transparencia. Pero algunas de sus palabras enigmáticas y la desnudez que se trasluce que pudiera despertar en mí atracción física, por el contrario me dicen que viene del maligno. Entonces surge la duda, ¿cómo sentir atracción física por un ser que no es físico? La duda misma debe ser suficiente aliciente para no tenerla, pero algo muy dentro de mí me dice que debo discernir más profundamente estos simbolísmos. Primero la veo como 15 mujeres distintas, pero que eran exactamente iguales, como clones, exceptuando el color de su cabello y el de sus ojos. Estos son tan variados como absurdos, los primeros cinco parecieran normales, los siguientes 10 son como de fábula; castaño claro, negro, marrón, rubio, cobrizo, plateado, violeta, amarillo, azul, rojo, verde, rosa, anaranjado, dorado y blanco. Cada una de ellas, actuando en pareja, transfiguraba algo distinto en mí. Mis ojos; una cambió el color otra arregló mi vista. Mi cabello; una cambio su textura, otra su apariencia. Mi piel; una la volvió más joven y la otra cambió su pigmentación. Mi contextura muscular; una cambió su tamaño y otra le dio mayor fuerza. El tamaño de mis extremidades; una las alargó y la otra les dio simetría. Mi dentadura; una la blanqueó y la otra la enderezó. Las imperfecciones de mi cuerpo; una eliminó manchas y vellos, y la otra eliminó torceduras en mis dedos y en mi nariz. Luego todas se unen en una sola, la del cabello blanco, y ésta me dice que yo podré hacer lo mismo en los que amo. Me toca la frente y todo desaparece. Luego aparece de nuevo explicando algunas cosas, no recuerdo las palabras exactas pero me explica que he de ser señal para todos, me dice por qué soy más alto (eso solo ocurre en la visión) por qué el cambio en la textura de mi cabello y el cambio de color en mis ojos. “La altura”, -me dice- “responde a tu condición de Cruz que al igual que Salomón debes sobresalir entre otras cruces”. Sobre mi cabello recuerdo que lo comparó con el de Sansón y ello justifica también la corpulencia, “eres Nazareo” me dijo. De mis ojos comentó que reflejan el cielo de donde supuestamente vengo, por eso deben ser azul celeste. Me dice que yo podré con mi dedo y conforme a la voluntad de Dios hacer nuevas todas las cosas. Esto pareciera contrario a la doctrina pero luego entiendo que la Cruz es un símbolo de nueva creación, es en la Redención, por la sangre derramada en la Cruz y el agua de tu costado, que todo ha de hacerse nuevo. Entonces ella me habla de doctrina de un modo cabalístico, y por ese lado tengo que obligatoriamente descartar que venga del maligno. Todo lo que me ha dicho es concordante con lo expresado por ti en las locuciones. Lo que sigo sin entender es por qué se presenta desnuda con una bata o alba blanca pero transparente como único vestido. Eso no lo puedo entender. Si esto fuera lo único que me sucede, como si fuera poco, pues no tendría tanto problema pensaría que es una simple forma de lidiar con los deseos carnales, una batalla entre la carne y el espíritu, pero eso es solo una de las muchas cosas que vivo. Luego me veo nuevamente transfigurado y transfigurando a otros, curando y sanando a personas con problemas físicos. Curaciones o sanaciones que tienen efectos distintos en las personas dependiendo de su edad, en muchos casos la sanación es rejuvenecedora. Pero en todos los casos les acerca a Dios. Y si les acerca a Dios no puede venir del maligno. Esto de las sanaciones es algo que me encantaría poder realizar, pues me siento impotente ante tanta enfermedad y sufrimiento de la gente. Si ellos entendieran la verdad de la cruz ese sufrimiento sería alentador y corredentor pero no todos los sufrientes son concientes de esto. Serían mucho más efectivas las oraciones si pensáramos así. Seguimos siendo una raza incrédula y mal agradecida a Dios que esperamos grandes portentos para creer, y mis visiones, si parten del deseo, lamentablemente son consecuentes con esa conducta. Cuesta mucho ser sumiso a tu voluntad mi Dios, cuesta más de lo que se pensaría.

Cuando comencé a discernir conjuntamente con otras personas sobre la Tau y comprendí tantas cosas de ella, pude ver una enigmática revelación sobre mi en la unión de san Pablo de Tarso con san Francisco de Asís. Ambos estigmatizados, uno de forma oculta y el otro de forma visible, y del mismo modo ambos inmersos en el misterio de la Cruz que en sí mismo es vivir estigmatizado, en la cual la presencia de la siempre Virgen María es inherente e insondable. Siempre Ella, bella, paciente, fiel, firme, al pie de la Cruz, revelando sus misterios corredentores. Madre mía, Madre de la humanidad, Madre del Verbo, Madre tuya mi Señor. Estando presente ella, ¿cómo podría manifestarse una criatura maligna? Veo como ese discernimiento despertó en santos de la talla de san Pío de Pietrelcina y santa María Faustina también estigmatizados y también, en uno los estigmas estaban visibles y en la otra ocultos, un profundo amor por el sufrimiento, no por el sufrimiento mismo sino por lo que el sufrir hace en aquella alma que lo ofrece y porque ese sufrir se convertirá en alegría cuando las Palabras de Cristo, tus palabras, en el Sermón de la Montaña se cumplan; “Bienaventurados los que lloran porque ellos serán consolados”. ¿Cuánto más he de llorar mi Cristo, cuánto más? Tu dirías; “lo que amerite”. Por ello la firma de la Tau en la bendición de san Francisco a Fray León se hizo en latín, quien no podía entender la santa alegría del Seráfico Padre que recién había recibido las marcas de tu Pasión, aquellas mismas a las que san Pablo hacía referencia cuando decía; “Sufro en mi cuerpo las marcas de la Pasión”. El sufrimiento trae consigo llanto. Si lo pudiéramos traducir literalmente utilizando la misma Tau como “t” que parte el nombre de León entre la “e” y la “o”, diría algo como; “Dios dice que aun te falta por llorar” o algo bastante parecido. Todo relacionado a lo que he venido viviendo y todo ello lo comprendo a partir de la Tau, y lo que me falta por comprender aun. Veo en esto que al igual que san Pablo no puedo sino gloriarme en tu Cruz, Señor. Al igual que san Francisco no puedo sino sentir una santa alegría ante el sufrimiento. No obstante, las dudas me invaden, la incertidumbre me corrompe, la desesperación me turba y solo deseo servir y amar al Amado pero no se cómo hacerlo, no se cómo ser fiel y cumplidor. No tengo director espiritual y tu mi Señor guardas silencio. ¡¿Por qué?!

¿Qué tienen que ver estos 15 colores? ¿Por qué tengo que ver la desnudez de esta mujer en un cuerpo perfecto que no es físico, que se presenta tan alta y que se dice de sí misma ser un Querubín? ¿Qué sucede mi Señor? ¿Seré realmente trasfigurado en esta vida o es solo mi deseo ante la tentación del poder? ¿Será esto un mero simbolismo premonitorio que me muestra misterios de la fe? ¿La fe al desnudo? ¿Pero, y los 15 colores, qué significan? Dime mi Señor si tú enviaste a este Querubín o si por el contrario es producto de mi imaginación o peor aun es un enviado del maligno. Necesito saber Señor, pero tú prefieres guardar silencio…no lo entiendo pero lo acepto. Ella no ha venido más, luego de que hablé sobre esto con una muy querida amiga y me aconsejó que me persignara ante su presencia y en tu nombre le pidiera que se marchara. No pude hacerlo porque ya no volvió. ¿Qué puedo entender por esto? Podría ser que en efecto era un espectro del maligno y para evitar el dolor de la Cruz no volvió o por el contrario, sí viene de ti y es tu deseo que la duda en mi me afiance en la fe. Necesito saber. He hablado con tres mujeres sobre esto, mi esposa y dos amigas. Las tres concuerdan en que debo tener cuidado. Solo mi esposa ha visto el dibujo que hice de esta mujer, y ella me dice que no le gustan los ojos, que le da un no se que. Pero yo sigo sintiendo que detrás de todo esto hay algo más que discernir, pero qué. Si en vez de quince mujeres, ella se hubiera dividido en doce tal vez lo entendería, pero ¿por qué 15? ¿Será los doce y la Trinidad? Por favor Señor déjame entender.

Me quedé esperando…Jesús no respondió.



Pasados 8 días, o sea el 30 de abril de 2008 Jesús respondió, y su respuesta fue, como siempre, sorprendente. Veamos.




+ He aquí la respuesta que esperabas Cruz. El discernimiento, hijo, debes ejercitarlo. Si bien lograste aclarar algunas cosas que has visto, otras aun te faltan por desvelar. La Tau ha sido designada desde siempre, pero sobre eso ya has aprendido bastante. Son uno tú y la Tau, son uno tú y la Cruz. ¿No te sentiste inspirado por mí hace ya más de un año en sellar la frente de tus hijos cada vez que se van a dormir con la señal de la Cruz? Y ahora denotas que ese es el sello del que he hablado desde el inicio. Me recuerdas mis años de infancia entre los hombres, cuando descubría poco a poco los designios de mi Padre se regocijaba mi alma y al mismo tiempo reconocía que lo sabía desde siempre. Te sucede igual Cruz, y ya llegará el tiempo en que el mundo te reconozca, es por ello que te pido perfección.

Entonces mi Señor, ¿si viene de ti la mujer que vi en mis sueños y luego en la visión en mi oficina?

+ Cruz, haces una mezcla de acontecimientos en tus recuerdos y como bien dices se fusionan deseo y castidad. Francisco le llamó Dama Pobreza, tú vez a tu esposa en ella. Francisco se desposó con ella, tú ya estás desposado y por ello lo que no has contado de tu visión te pareciera pecaminoso. Tú pusiste rostro a la pobreza y ella te mostró lo que ha de venir. Ella no se dividió mi bien ella más bien se fusionó. Tú pusiste tu discernimiento en ello, y yo lo apruebo, pero ya en su momento entenderás la verdadera razón de tanto simbolismo. ¿No es en el casamiento que se unen una carne y la otra en una sola? Si, exactamente Cruz 15 años a partir de tu Matrimonio. Cuentas bien los años, a esa edad se suscitó el Tránsito de Francisco, y es el número que ha venido surcando tu cabeza por siempre. 44 años tendrás al cumplirse tus quince años de Matrimonio. Ahí me verás, yo te buscaré, pero debes encontrar tu perfección. Tres años y medio restan Cruz. Todo está previsto.
Ese Querubín que viste con la belleza de tu esposa es la Sabiduría de mi Espíritu, la misma que se vistió de Dama Pobreza a Francisco, la que él vio como dueña y señora de la Estancia Celestial que le mostré.

De más está decir mi Señor, que no tengo palabras. ¡Alabado seas, loado seas, bendito seas por toda la Eternidad!

+Te aturdes en alabanzas como Pedro, Santiago y Juan en la Transfiguración. Y noto que según te hablo vas entendiendo. Estoy desvelando para ti un misterio que se te mantenía oculto. Agradezco, si en algo se pudiera, tus alabanzas mi bien, pero estás llamado a cosas más altas. Estas llamado a la perfección. No puede la Trinidad forzar nada en ti mi bien. Debe lo que está destinado desde la Eternidad fluir en ti como un anhelo y debe ser aceptado por ti voluntariamente. Tal como yo acepté morir por ti y por todos, tal como mi Padre aceptó entregarme a la muerte por ti y por todos, tal como el Espíritu común en nosotros luego de lograr mi encarnación un mí santísima Madre, aceptó dejarme morir en la Cruz por ti y por todos. Pues en esa aceptación se suscitó la redención de las almas y la apertura del camino a la perfección. Los tres unidos en uno hicimos de la Resurrección esa apertura. El camino es arduo y pedregoso. De ello pueden dar fe todos los que me han seguido, pero aquella recompensa que mostré a mi pequeño de Asís hace de esa angustia un bálsamo de placeres divinos en la presencia de mi Padre. Buscar la perfección es entonces mi bien caminar ese camino de fatigas, angustias y sinsabores. Francisco logró esa perfección que tu dama Pobreza te exige, Pío también lo logró, y así todos los santos de mi Padre. Ninguno de ellos tenía certeza material pero sí un sinfín de certezas divinas que solo se logran con la fe. La fe hijo de mi alma que yo te infundo para que seas otro Pío y otro Francisco, de modo que todos te vean como el Cristo. Así ha de ser, así lo pactamos en tiempos que no recuerdas, así lo aceptaste entonces, y la pregunta, de la cual conozco respuesta es; ¿lo aceptas ahora?

Sabes que mi vida toda es tuya mi Señor. Claro que lo acepto.

+Entonces encamina tu rumbo a la perfección, y te adelanto problemas, desalientos e incredulidades. Vence todo como un paladín, vence con la Cruz, vence con la fe, vence con mi amor. Se que temes mi bien, se que hay dudas, se que existen preguntas, se que no sabes si los tuyos lo aprobarán, se que en estos momentos las situaciones financieras que vives no son las mejores. Pero a todo esto digo y sello; que te baste mi amor.

¿Qué debo hacer?

+Vive desde hoy consagrado exclusivamente a la Cruz, elimina de ti los malos pensamientos, elimina de ti todo lo que te aparte de mí, vive como si fuera Yo quien vive en tu cuerpo, y verás como tu cuerpo reflejará mi santidad. Piensa como Yo pensaría, actúa como Yo actuaría, habla como Yo hablaría. Que tu palabra sea ley, que lo que surja de tus labios no sea escándalo para nadie. Tus palabras deben ser dulces como la miel y filosas como la espada. Denuncia, anuncia y pronuncia siempre las Palabras del Padre del Cielo. Que no te turben las burlas, ni te preocupe lo que otros puedan pensar. No falles a los Sacramentos y que no sean los rituales tu prioridad. Ora mucho siempre y en todo lugar. Procura ser el menor de los menores, no quieras lucir entre los primeros sino desluce entre los últimos. Cuando te sea encomendada una función de jerarquía no la rechaces pero ejércela desde la minimidad. Se paciente y buen padre, se amoroso y buen esposo, se encomiablemente buen hijo y sobre todo se buen hermano. En resumidas cuentas Cruz, ama y ama mucho que con ello cumples mis mandatos.

Aun no se si llorar o reír, sigo sintiéndome inmerecedor de tus palabras, y ahora también inmerecedor de todo esto que me indicas. Soy muy pecador Señor, sabes que no podré cumplir con presteza lo que me encomiendas…pero como dices, tu amor me basta. Si me dejo amar por ti, que sea tu amor quien actúe. Solo tu amor, yo nada puedo sin ti.

+Tienes mi amor…se santo. Recuerda que los pecados son parte del proceso, procura no cometerlos, pero que esa imperfección momentánea no mengue tu búsqueda de la perfección hasta llegado el momento de tu Tránsito. Frecuentas los Sacramentos y con ello minimazas las posibilidades de pecar. Se prudente, se precavido, se humilde. Yo te doy todo mi amor para que la santidad sea en ti tan espontánea como respirar. Abandónate en los brazos de mi Madre, quien siempre está a tu lado. No peques más hijo, pero que no te turbe el pecado. Quien lea que entienda. Sean perfectos. Mantente en mi paz.

Que así sea.